Infanto Juvenil

Realizamos evaluaciones e informes psicológicos detallados sirviéndonos de distintas herramientas que nos permite recabar gran cantidad de información sobre el niño en caso de que los padres lo requieran. Las evaluaciones se realizan en ambientes afables y adecuados, para que el niño no se sienta presionado, ya que entendemos que pueden ser contextos extraños para él o ella. Inicialmente trataremos la demanda de los padres, que nos contarán qué ocurre y qué necesitan. A partir de ahí trazaremos un plan para el proceso evaluativo que detallaremos previamente a los padres.

Algunos niños presentan dificultades para seguir el ritmo, estas dificultades se pueden reflejar en una asignatura o de forma general. Si observamos que nuestro hijo tiene problemas en clase puede deberse a distintos motivos, no hay una única razón. Para ello analizaremos el caso de cada niño para conocer las causas y poder adaptar nuestra actuación. No podemos olvidar que cada niño es único y diferente, por lo que no existe una única respuesta ni intervención.

Cuando hablamos de ansiedad, depresión, miedos y fobias, es importante estar atentos a las señales que nos ofrecen los niños, ya que no sólo les va a dificultar su funcionamiento actual, además podrá derivar en futuros problemas y hábitos si no lo tratamos en estas etapas. Para ellos supone una sensación nueva que no sabrán identificar y comprender, por lo tanto, se podrá disfrazar como agresividad o tristeza. Los niños suelen expresar este malestar como un “dolor de tripa” y/o “ganas de vomitar”.

Los problemas de conducta pueden expresar muchas cosas, a veces se debe a la incapacidad del niño para afrontar nuevas situaciones. Otras veces surgen como consecuencia de un cambio en la forma de comunicarnos con nuestros hijos, poniendo normas y tareas que no están dispuestos a aceptar. Existen múltiples causas de la conducta problemática que debemos conocer y comprender para poder buscar una solución adaptada al niño.

Los problemas de adaptación suelen surgir cuando se produce un cambio, como el inicio en un nuevo colegio, una nueva casa, la separación de los padres, etc. Ante estas situaciones se origina un estrés que no se sabe manejar e impide la buena adaptación.

Los problemas escolares afectan al rendimiento escolar y si se mantienen en el tiempo, podría derivar en fracaso escolar. El fracaso escolar es uno de los motivos principales por los que los padres suelen pedir ayuda. Para estos casos es necesaria una comunicación fluida con los profesores para poder detectar este problema.

Un mal hábito de estudio se detecta cuando el rendimiento académico no es bueno y tienen dificultades, por lo que necesitan una ayuda para poder mejorar. Cuanto antes se entrenen en esta área, más sencilla será su trayectoria escolar y menos dificultades tendrán en cursos posteriores.

Este concepto hacer referencia a cualquier forma de maltrato: físico, verbal o psicológico, entre compañeros de colegio de forma frecuente y mantenida en el tiempo. Si no se tratan estos casos a tiempo, el bulling podría producir secuelas psicológicas, por lo que es muy importante detectar estos casos lo antes posible.

Nuestra preocupación puede ser los problemas que hay entre nuestros hijos y nosotros: dificultades en la comunicación, falta de afectividad, mala comprensión, etc.

Si quieres mejorar la relación con tu hijo, podemos facilitarte recursos y herramientas para que, juntos, aprendáis la importancia de tener una relación afectiva segura y lleguéis a conseguirla.